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Elías Lixa: accidente, impunidad y el eterno reflejo del panismo en desgracia

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Un nuevo episodio de impunidad azul sacudió este fin de semana las calles del norte de Mérida. El diputado federal Elías Lixa Abimerhi, coordinador del Grupo Parlamentario del PAN en la Cámara de Diputados, protagonizó un accidente vial en la colonia México, dejando un automóvil volcado tras una imprudencia al volante. Según testigos, el legislador intentó cruzar sin la debida precaución, impactando a un vehículo March que terminó con las llantas al aire. Aunque por fortuna no hubo lesionados graves, el hecho destapó algo más profundo que un simple choque: el descaro y la prepotencia de quienes se saben protegidos por el poder.

Como era de esperarse, la maquinaria panista se activó de inmediato. Los defensores de oficio de Lixa —los mismos que aplauden cualquier error del clan Vila–Patrón— salieron a justificar el accidente con frases dignas de una comedia barata: “a cualquiera le pasa”, “no fue su culpa”, “otro coche le tapó la visión”. Mientras tanto, la alcaldesa Cecilia Patrón Laviada guarda un silencio cómplice, y el gobernador Mauricio Vila mira hacia otro lado, confirmando que en Mérida la ley no aplica igual para todos. Porque claro, cuando eres del grupo de los privilegiados, los choques se borran, los errores se editan y los culpables siempre tienen seguro contra la vergüenza.

Pero el pueblo ya no se traga el cuento. En redes sociales, los meridanos reaccionaron con furia y sarcasmo, recordando que Lixa no es más que un político de cartón, sostenido por favores y rodilleras. Con comentarios como “Con la niña NO” “Elias con dos chupadas a VilaBb mañana carro nuevo”. Entre memes, críticas y comentarios mordaces, la ciudadanía dejó claro que ya no hay paciencia para los “niños consentidos” del panismo. Este accidente no fue solo un golpe de lata: fue otro golpe al ego inflado de una clase política que confunde poder con impunidad. Y lo peor, lo hacen sonriendo para la foto, como si la ciudad no estuviera cansada de esquivar sus errores… y sus camionetas.