Xmatkuil 2025: cuando el pueblo habló más fuerte que la oposición
La Feria Yucatán Xmatkuil 2025 volvió a demostrar —con datos, emociones y un mar de gente— que la realidad siempre termina aplastando las narrativas de la oposición. Mientras el PRIAN anunciaba desde hace semanas que la feria sería “un fracaso rotundo”, este fin de semana más de 450 mil asistentes desbordaron el recinto ferial, generando un flujo vehicular tan grande que se convirtió en evidencia irrefutable del éxito: Xmatkuil no solo está más vivo que nunca, Yucatán está más vivo que nunca. Lejos de la farsa repetida por los detractores, la afluencia masiva mostró la confianza de las familias yucatecas en espacios seguros, cuidados y pensados para su disfrute.
La jornada también estuvo marcada por un momento profundamente emotivo dentro de la feria: la presencia de 50 niñas y niños de Casa Otoch, quienes vivieron una noche inolvidable en el concierto de la joven artista Lara Campos. Gracias al acompañamiento del DIF Yucatán y de su Presidenta Honoraria, Wendy Yamile Méndez Naal, la niñez bajo resguardo institucional pudo disfrutar —muchos por primera vez— un espectáculo de gran formato, rodeados de cariño, seguridad y un ambiente que fortalece su desarrollo emocional. La sonrisa de cada uno de ellos confirmó algo que la oposición nunca podrá opacar: en Yucatán hay un gobierno que pone a la gente al centro, que cuida y protege, y que entiende que el bienestar también se construye desde la alegría.
El crecimiento explosivo de Xmatkuil trae consigo retos viales que hoy requieren una planificación más amplia, pero también refleja el efecto positivo de una economía que se mueve, consume, convive y confía. Yucatán vive una derrama económica que no surge por casualidad, sino del esfuerzo conjunto entre gobierno, ciudadanía y sector productivo. La feria más grande del sureste volvió a superar expectativas, venció pronósticos políticos y dejó claro que, cuando la gente quiere vivir, celebrar y sentirse cuidada, ni el ruido opositor ni las campañas de desánimo pueden contra el ánimo de un estado que avanza unido.
